Ahora que se acerca el buen tiempo, es más habitual ver a gente paseando por la playa, disfrutando de un ambiente más cálido, pero en muchas ocasiones, la cantidad de basura que se encuentra dispersa por la arena de la playa puede suponer un peligro, ya que no es la primera vez que alguien acaba con un corte en la planta del pie debido a algún trozo de cristal escondido entre la arena.
Estos residuos cada vez se están convirtiendo en un problema mayor, ya que dejamos un rastro de 352 objetos en forma de residuos cada cien metros. Los datos proceden de un estudio de seguimiento realizado durante el verano pasado en 12 playas andaluzas y ceutíes dentro del proyecto Marnoba, que coordina la asociación Vertidos Cero. Este problema no solo ocurre en las épocas vacacionales en estaciones veraniegas, sino también en invierno, unos 200 restos de residuos cada 100 metros.
Aparte de constatar que no solo el sector turístico, sino también la pesca, la industria y la agricultura contribuyen a la contaminación costera, otra de las conclusiones de Marnoba es que en verano los residuos de papel/madera superan en porcentaje a los de plásticos y los higiénico-sanitarios debido a las colillas y las voladuras de servilletas y manteles de los chiringuitos. Sin embargo, el material dominante a lo largo del año es el plástico.
Es importante recordar que la playa, como otras zonas naturales, son de todos, y que hay que esforzarse y contribuir para que podamos disfrutarlo todos, sin tener que vigilar cada paso que damos por si sufrimos algún contratiempo.
Estos residuos cada vez se están convirtiendo en un problema mayor, ya que dejamos un rastro de 352 objetos en forma de residuos cada cien metros. Los datos proceden de un estudio de seguimiento realizado durante el verano pasado en 12 playas andaluzas y ceutíes dentro del proyecto Marnoba, que coordina la asociación Vertidos Cero. Este problema no solo ocurre en las épocas vacacionales en estaciones veraniegas, sino también en invierno, unos 200 restos de residuos cada 100 metros.
Aparte de constatar que no solo el sector turístico, sino también la pesca, la industria y la agricultura contribuyen a la contaminación costera, otra de las conclusiones de Marnoba es que en verano los residuos de papel/madera superan en porcentaje a los de plásticos y los higiénico-sanitarios debido a las colillas y las voladuras de servilletas y manteles de los chiringuitos. Sin embargo, el material dominante a lo largo del año es el plástico.
Es importante recordar que la playa, como otras zonas naturales, son de todos, y que hay que esforzarse y contribuir para que podamos disfrutarlo todos, sin tener que vigilar cada paso que damos por si sufrimos algún contratiempo.